Todas las cremas de Anhelle, gracias a su activo estrella, los fosfolípidos, crean como una segunda piel, protectora y reparadora de agresiones externas y responsable de mantenerla óptimamente hidratada.
Son cremas sin parabenes, siliconas ni conservantes y con perfumes cuidadosamente seleccionados, libres de alérgenos para evitar alérgias e irritaciones comunes debido a las fragancias en los cosméticos y satisfacer, también, las pieles más sensibles.
Sus envases de última generación aseguran el perfecto mantenimiento del producto en su interior evitando riesgos de contaminación y manipulación, facilitando al mismo tiempo su aplicación.